La palabra sabático se deriva del hebreo shabbat que significa "el día de descanso" refiriéndose al sábado. Y así como se deja reposar una tierra para ser más productiva, lo mismo sucede con nuestro cuerpo y mente al darle un tiempo de descanso para su recuperación. Un año sabático es pues un período de doce meses consecutivos en los que uno se libera voluntariamente de sus actividades laborales o académicas para poner en marcha sus intereses personales. Quizás pensemos que esto es una locura, imposible de realizar por que tendríamos que abandonar nuestro trabajo y por lo tanto dejar de percibir un sueldo, descuidar la escuela o la familia, sin embargo es posible ya que no se trata de ocupar ese tiempo para hacer nada o realizar largos y costosos viajes a lugares exóticos; un año sabático cntempla el descansar realizando otras actividades que nos gustan y para las que generalmente no tenemos tiempo. ¿Qué se puede hacer durante un año sabático?
¿Qué beneficios tiene tomarse una año sabático?
Cómo planear un año sabático Una vez que has decidido tomar un año sabático empieza a organizarlo. - Elije una fecha de salida y el tiempo que estarás de descanso para que puedas agendar todas tus actividades. - Define tu situación laboral, si deseas o no regresar al trabajo actual e investigar si es posible que la empresa te ocupe a tu regreso. - Antes de dejar tu trabajo actualiza tu currículum por si es necesario utilizarlo. - Tomar un año sabático no es algo que se decida de la noche a la mañana, se necesita tiempo para su planificación (1 o 2 años) donde se incluya un plan de ahorro para cubrir los gastos. La clave para hacer un paréntesis en nuestra vida y gozarlo se centra en las razones del porque queremos tomarnos ese descanso prolongado, desde luego su planeación, hacerlo voluntariamente y tener la certeza de que será positivo para nuestra vida al reforzar la formación personal. |